lunes, 4 de junio de 2012

La corrupción un asunto teológico a tratar en el libro del profeta Jonas


1. BOSQUEJO DEL CONTENIDO

I. La rebelión del profeta y su castigo: 1:1-16.
a) La rebelión del profeta ante la Palabra de Dios: 1:1-3.
i. La llamada y la comisión: 1:1-2.
ii. La huida: 1:3.
b) El castigo del Señor: 1:4-16.
i. La tormenta: 1:4-6.
ii. El juicio: 1:7-9.
iii. La sentencia: 1:10-14.
iv. El castigo: 1:15-16.

II. La providencia divina y la oración penitencial: 1:17-2:10.
a) El profeta es tragado por el gran pez: 1:17.
b) La oración de acción de gracias del profeta: 2:1-9.
i. La angustia: 2:2-4.
ii. La necesidad de liberación: 2:5-7.
iii. La alabanza por la liberación: 2:8-9.    
c) El profeta es liberado: 2:10.

III. La obediencia del profeta y el resultado de su predicación: 3:1-10.
a) La obediencia del profeta: 3:1-4.
b) Los resultados de la predicación del profeta: 3:5-10.
i. La respuesta del pueblo ninivita: 3:5.
ii. La respuesta del rey: 3:6-9.
iii. La respuesta de Dios: 3:10.

2. TEMA GENERAL DEL LIBRO
                             
Primero, el libro de Jonás ofrece una prueba de la ilimitada gracia y misericordia que Dios exhibe no sólo hacia su pueblo Israel, sino también hacia la pagana ciudad de Nínive. Esto muestra que Dios le había dado una oportunidad a este pueblo de arrepentirse para poder vivir. A Israel o a los judíos, respectivamente, les resultaba muy difícil comprender esto porque consideraban que sólo ellos eran el pueblo elegido de Dios (Mateo 12:41; 16:4; Lucas 11: 29,32; Hechos 10:11).
Segundo, el libro de Jonás contiene una representación simbólica de la historia del pueblo de Israel. Este pueblo fracasó como testigo para Dios y, al igual que Jonás, tendrá que estar durante mucho tiempo en el mar de las naciones, en la dispersión. Pero Israel es guardado de una manera milagrosa, como lo fue Jonás, y podrá dar testimonio para Dios a las naciones en un tiempo futuro. En aquel día, el evangelio del Reino será anunciado sobre la faz de la tierra por judíos convertidos.
Tercero, Jonás es tipo de Cristo. En Mateo 12: 39-40, el Señor Jesús anunciaba a escribas y Fariseos que ninguna señal les sería dada, sino la señal del profeta Jonás: “Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches”. Otra señal dada a Israel es el mismo Señor Jesús dirigiéndose a las naciones, tal como leemos en Lucas 11:30 (ver también Mateo 28:19; Marcos 16:15; Lucas 24:47).
Cuarto, el libro de Jonás nos enseña acerca del corazón del hombre que, tanto en incrédulos como en creyentes, casi siempre rechaza someterse a la voluntad de Dios, busca su propio honor, piensa antes que nada en sí mismo, y que puede llegar a ser duro como una roca para los demás hombres. Y a veces el corazón humano se complace en la verdad de Dios tan solo porque encuentra en esto la ocasión de exaltarse a sí mismo. Todo esto debía aprenderlo Jonás.

3. ASUNTO TEOLÓGICO

La corrupción es actualmente uno de los problemas más grandes de Colombia, grandes escándalos han sacudido a nuestro país en los últimos años, el caso foncolpuertos, el desfalco de las eps, los falsos positivos, las escandalosas cifras de obras pagadas a los Nule y otros cientos de casos de corrupción que sabemos y que no sabemos son muestra de este mal que evidencia la decadencia de la sociedad.
En cada uno de los poderes públicos de Colombia el legislativo conformado por el congreso, el ejecutivo, conformado por el presidente y sus ministros, el judicial conformado por las cortes y las diferentes salas, tribunales y en los órganos de control como la procuraduría, la contraloría y la fiscalía, se ha infiltrado la corrupción con hechos que indignan a nuestra nación. Y qué no decir de las fuerzas armadas; también Otros sectores como la Registraduria, las organismos de seguridad del Estado como el DAS ostentan altos niveles de corrupción, pero este problema no radica en las instituciones y organizaciones pues como dice el proverbio los “hombres pasan las instituciones quedan”, pero si en cada persona que deseando el poder político, económico o de cualquier otro índole aplica métodos ilegales, fraudulentos, mentirosos a los cuales llamamos corrupción.

Este grande mal se encuentra en el corazón del hombre; en el evangelio de mateo  en el capítulo 15 versículo 19 nuestro Señor Jesucristo   declara esta verdad, así pues vemos a nuestro alrededor A muchos deseando alcanzar sus propios deseos a toda costa manifestando la corrupción que hay en su corazón dejando salir  los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios y  las blasfemias.

La biblia nos cuenta en el libro del profeta Jonás una historia parecida a la de nuestra realidad actual, un pueblo llamado Nínive que como nuestro país estaba llena de corrupción y maldad,  En el mundo antiguo, la historia más sangrienta y la crueldad más viciosa de la que ha quedado constancia es posiblemente la de los ninivitas, que encontraron más maneras increíblemente ingeniosas de ser crueles que ninguna otra nación que jamás haya vivido. Era un pueblo brutal, impío y pecador y Jonás los odiaba. Lo que más deseaba en el mundo era ver a Nínive destruida, pero a pesar de eso cuando Dios le mandó a anunciar su destrucción a Nínive, dijo: "Te conozco demasiado bien, Oh Dios. Si alguien por arrepentirse te da la más mínima oportunidad de ser misericordioso, cambiarás de opinión y no llevarás a cabo tu sentencia sobre ellos por lo que huyó a Tarsis.

Esto es lo mismo que estamos viviendo hoy en día, así como le paso al profeta que no quería predicarle a este pueblo el cual tenía unas costumbres muy inhumanas y atroces y todo el odio que hubiera podido experimentar por ese pueblo, podemos mirarnos cada uno de nosotros como un Jonás que sabiendo cómo esta nuestro país, sumido cada vez en este problema tal vez por odio o por querer tener alguna exclusividad con algunas personas precisamente por todo lo malo que sabemos que hacen o han hecho a este país no les predicamos y no les exponemos el evangelio de un Dios de amor y misericordia tal como no lo plantea el libro de Jonás, sabiendo pues que nosotros como creyentes, que el único que puede hacer caer en cuenta a las personas de todas sus fallas y pecados es Dios y que no es por nuestras propias fuerzas sino por el único y soberano Dios,  que cambia nuestros corazones y nos hace personas nuevas.

Dios odia el pecado, y llama al arrepentimiento. — El pecado es desobediencia a la Palabra de Dios. La desobediencia a Dios trae consecuencias. Dios tiene un plan para que todos vivamos sometidos a ese plan. A ese plan le podemos llamar “La Voluntad de Dios”.
Donde no se teme a Dios no se respeta la vida humana, nuestra nación es conocida como corrupta y violenta. El tráfico de droga, la prostitución, u otras cosas, muestran que cada una prueba que los que están envueltos en ese tipo de acciones ilícitas, no temen a Dios. Una forma de saber que no temen a Dios, es porque no tienen frenos en sus hechos. En colombia la violencia sigue incrementando, unida con el robo el asesinato, y todo lo que ya hemos mencionado.

El pecado es como un cáncer que tiene que ser cortado. Por eso Dios llama al arrepentimiento para que haya un cambio de desobediencia, a la obediencia para que haya vida en lugar de muerte.

Dios no hace acepción de personas y quiere que todos vengan al arrepentimiento, así como comisiono a Jonás a predicar en Nínive para que se volvieran de sus malos caminos, nos ha comisionado a nosotros a la iglesia de Jesucristo, pero queda la pregunta ¿le estamos predicando a todos los que andan vagando como ovejas que no tienen pastor a aquellos que andan tras sus propios deleites corrompiéndose y corrompiendo a otros como forma de vida y de obtener más? La respuesta es que en Colombia la iglesia en muchas ocasiones no ha cumplido a cabalidad esta encomienda, como Jonás ha huido de la realidad tratando de abstraerse de los problemas que afronta nuestra nación a tratado de huir a ese tarsis de la religión vacía, no ha llamado al arrepentimiento a aquellos poderosos  que  gobiernan y deciden en la nación,  los pecados nacionales de omisión y acción por parte de todos aquellos que se encuentran en alguna posición del Estado no se han denunciado.

La iglesia debe retomar su misión, debe levantar su voz escuchar la voz del Señor que dice “clama a voz  en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado”. (Isaías 58:1).

Dios  ha enviado a hombres y mujeres como señales para esta generación. ¿Y cuál es esa señal? Es la señal de Jonás, la señal de la resurrección, la señal de personas que antes estuvieron muertas y que ahora tienen vida gracias a Jesucristo. ¿No es ese el motivo por el que el Señor dijo: "Porque así como Jonás estuvo tres días y tres noches en el vientre del gran pez, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches. (Mat. 12:40) ¿No es ese el mensaje fundamental de nuestra proclamación, que hay un Dios que puede producir vida de entre la muerte, que puede resucitar a aquellos que han sido tragados por el vientre de una ballena o un pez, perdidos, sin esperanza, pero redimidos? Y los testigos de esta proclamación son las vidas resucitadas de aquellos que, como Jonás, declaran ese mensaje en nuestros días.

“Misericordioso y clemente es Jehová; lento para la ira, y grande en misericordia. No contenderá para siempre, ni para siempre guardará el enojo.” (Salmo 103:8-9).

Jonás estaba seguro de que si los Ninivitas se arrepentían, Dios los iba a perdonar. La infinita compasión de Dios por todos los seres humanos, cualquiera que sea su raza o color está vigente, creyendo a esto debemos avanzar en encontrarnos con Dios con su amor y compasión con El que dice “Nínive, una gran ciudad donde hay más de ciento veinte mil personas que no distinguen su derecha de su izquierda, y tanto ganado, ¿no habría yo de compadecerme?” así lo hará estemos seguros con un pueblo que se vuelve de sus malos caminos, con el que se arrepiente dando la espalda a la maldad y al pecado.

Los verdaderos milagros del libro no son la tempestad, el gran pez, la preservación de la vida del profeta rebelde, la aparición y desaparición abruptas del ricino, sino, fundamentalmente, el arrepentimiento de los hombres y mujeres de Nínive. Y, al mismo tiempo, todos estos elementos se dan en medio de la soberanía divina.

Recordemos que la fiabilidad de cualquier acto sobrenatural o milagroso depende del poder de Dios para realizarlo, y nunca de la habilidad del hombre para explicarlo.

El libro de Jonás está lleno de enseñanzas para nosotros. La más grande es que Dios quiere que todos vengan al ARREPENTIMIENTO. Dios quiere la salvación de todos, creemos que también para nuestra Colombia tierra querida.

BIBLIOGRAFIA

Yebra Serrano J. “EL LIBRO DEL PROFETA JONÁS (TRADUCCIÓN Y  COMENTARIO)” comunidad Cristiana Eben ezer, Vallecas-Villa España, 18 de Junio de 2001.
Remmers A. El Profeta Jonas, Biblecentre.org Page Last Updated Thursday 26-Jul-2007 8:33 GMT
Stedman Ray C. JONAS: EL EMBAJADOR RENUENTE. Seminario Biblico Reina Valera. 1966.
Biblia. Versión Reina Valera 1960. Sociedad Biblicas Unidas 1960
Biblia Versión de estudio Thompson
Biblia. Versión  Nueva versión internacional. Sociedad Biblica Internacional. 1999.

No hay comentarios:

Publicar un comentario